Hoy en día, nadie se mueve sin llevar encima su smartphone. Por lo tanto, todo el mundo está accesible en todo momento y puede conseguir la información que desee cuando lo desee. Puedo, por ejemplo, hacerle saber a mi esposa que estoy en el centro comercial, por si necesita algo. Un dispositivo como este ofrece muchas posibilidades y nos acostumbramos rápidamente a él. Algunos se preguntan cómo se comunicaba la gente cuando no había Internet y con un solo teléfono
se daba servicio a todo un pueblo.

¡Pueblo mío, confía siempre en él! ¡Habladle en oración con toda confianza! ¡Dios es nuestro refugio!

Salmos 62, 8

Dios siempre ha estado accesible. Algunos piensan que la fe está anticuada, pero las maravillosas obras de Dios se pueden ver en todas partes. Dios está al día, nunca se ha desactualizado, siempre está en línea y está presente en cada momento. Él nos invita: «Ven a mí con tus preocupaciones. Desahógate conmigo y déjame actuar. Yo me
ocuparé de ello, y también de ti».

Nadie tiene mejores propósitos para ti que Jesús. ¿Por qué no lo intentas? Dios está esperando tu llamada.

Texto de la semana: Salmo 62, 1-13